Hacerse pasar por otra persona es un delito y como tal está penado. Pero existe una diferencia entre suplantación y usurpación de identidad que muchos desconocen. En ambos casos, el que lo comete busca beneficiarse a sí mismo o dañar a la víctima; sin embargo, el alcance del engaño es distinto. A continuación explicamos estos conceptos para que sepas distinguir entre ellos.
¿Qué es la suplantación de identidad?
Cada vez vemos con más frecuencia casos de suplantación de identidad, en especial en el ámbito digital. Las consecuencias pueden ser devastadoras, pero ¿de qué se trata?
Definición legal y ejemplos comunes
Suplantar la identidad significa hacerse pasar por otra persona; por ejemplo, utilizando su nombre, información personal, o incluso falsificando documentos. Quien lleva a cabo esta acción lo hace para obtener un beneficio, causar un perjuicio o cometer un delito.
Algunos ejemplos de suplantación de identidad incluyen la creación de perfiles falsos en redes sociales. En estos casos se utiliza el nombre y las fotos de otra persona, bien sea para interactuar, difundir información falsa o dañar la reputación de la víctima.
Asimismo, se utiliza la información de otros para realizar compras fraudulentas en línea, falsificar documentos o realizar trámites legales.
Situaciones de este tipo ocurren, incluso, dentro de la familia y llegan a convertirse en un motivo de divorcio.
Consecuencias legales de la suplantación
La suplantación como tal no está estipulada como un delito en el Código Penal. Sin embargo, las acciones que se realizan utilizando una identidad falsa sí son un delito.
Lo anterior significa que las consecuencias de la suplantación de identidad dependen del delito que se haya cometido. Las estafas se castigan con penas de prisión de seis meses a tres años. La falsedad documental puede derivar en un castigo similar al anterior o multas de seis a 12 meses.
Cuando se daña la reputación de otra persona, la víctima puede interponer una demanda por vulneración del derecho al honor y a la propia imagen.
¿Qué es la usurpación de identidad?
Usurpar la identidad de una persona, en cambio, sí está tipificado como delito en el Código Penal español.
Definición legal y casos típicos
La usurpación de la identidad también es hacerse pasar por otra persona, pero en este caso no sólo usa la identidad, sino que asume sus derechos y obligaciones legales.
Por ejemplo, contraer matrimonio utilizando la identidad de otra persona, lo que puede traer consecuencias en el ámbito del derecho de familia.
Otros ejemplos de usurpación de identidad pueden ser recibir herencias o presentarse a oposiciones utilizando la identidad de otra persona.
Sanciones asociadas a la usurpación
El artículo 401 del Código Penal establece una pena de prisión de seis meses a tres años para quien usurpe el estado civil de otro. La gravedad de la pena dependerá de las circunstancias del caso y del perjuicio causado a la víctima.
El estado civil se refiere a los datos registrados de las personas como nombre y apellido, edad, sexo, nacionalidad, matrimonio, defunción y demás.
Además de la usurpación, también se establecen las penas por los delitos que se cometen bajo la identidad de otra persona.
Comparativa entre suplantación y usurpación de identidad
Es posible confundir ambos conceptos; sin embargo, hay que entender que se trata de situaciones diferentes. Aunque, en principio, se refieren a utilizar la identidad de otra persona, la usurpación va más allá y se apropia también de los derechos de la víctima. Por ello se considera un delito.
Principales diferencias legales
Como vemos, la diferencia principal entre estos conceptos es la tipificación como delito. La usurpación de identidad está recogida en el artículo 401 del Código Penal, mientras que la suplantación, en sí misma, no lo está.
La suplantación de la identidad suele cometerse en acciones puntuales, como medio para cometer un delito. En cambio, la usurpación es un delito, más allá de las consecuencias que pueda tener.
En la usurpación se asume por completo la identidad de la víctima. Y es un delito continuado en el tiempo.
Tanto la suplantación como la usurpación pueden tener consecuencias graves, tanto emocionales como a nivel financiero.
Impacto en las víctimas
Ambas situaciones pueden tener un impacto devastador en las víctimas, que incluyen:
- Daños económicos: pérdidas financieras por compras fraudulentas, deudas contraídas a su nombre, etc.
- Daños a la reputación: difusión de información falsa, comentarios difamatorios, entre otros.
- Problemas legales: investigaciones policiales, imputaciones por delitos que no han cometido, etc.
- Estrés emocional y psicológico: ansiedad, depresión, miedo, etc.
En el ámbito del derecho de familia, la usurpación de identidad puede tener consecuencias graves, como la anulación de un matrimonio fraudulento o la impugnación de la filiación. Si estás enfrentando una situación de este tipo, busca la asesoría de abogados matrimonialistas.
¿Cómo actuar en caso de ser víctima?
Si eres víctima de suplantación o usurpación de identidad, lo mejor es actuar cuanto antes. Tomar medidas a tiempo puede mitigar el impacto de los daños, así como prevenir más problemas en el futuro.
Pasos legales a seguir
Para emprender acciones legales en contra del usurpador, lo primero será recopilar las evidencias que demuestren el delito. Por ejemplo, correos electrónicos sospechosos, comunicaciones fraudulentas, documentos bancarios inusuales, etc.
Al tener las pruebas, presenta una denuncia ante las autoridades pertinentes. Explica lo que ocurre y muestra las evidencias que tienes. Asegúrate de obtener una copia de la denuncia.
Luego informa a los entes donde se haya producido la suplantación o usurpación; por ejemplo, las entidades bancarias. Es posible que debas presentar la copia de la denuncia. Conserva toda la documentación relacionada con el caso.
Prevención y protección de la identidad
Es importante tomar medidas para proteger la identidad y evitar ser víctima de usurpación. Toma nota de las siguientes recomendaciones:
- No compartas información personal sensible (DNI, número de la Seguridad Social, contraseñas, etc.) en sitios web o aplicaciones no seguros.
- Crea contraseñas complejas y únicas para cada cuenta online.
- No abras enlaces ni descargues archivos adjuntos de remitentes desconocidos o sospechosos.
- Revisa con frecuencia tus extractos bancarios y transacciones online para detectar cualquier actividad sospechosa.
- Evita compartir en redes sociales información personal que pueda ser utilizada para suplantar tu identidad.
- Mantén tu ordenador y dispositivos móviles protegidos contra virus y software maliciosos que puedan robar tu información personal.
Servicios legales especializados: Asesoramiento jurídico en casos de suplantación
Contacta a un abogado para que te asesore sobre los pasos a seguir para denunciar la suplantación; así como la responsabilidad civil y penal del suplantador.
Un jurista también te puede ayudar a emprender acciones para eliminar perfiles falsos y contenido difamatorio, y conseguir compensación por los daños morales causados.
No sólo se trata de entender la diferencia entre suplantación y usurpación de identidad. También es importante tomar medidas de prevención para evitar ser víctima de este delito.